viernes, 10 de agosto de 2012

Samuel Amador Vázquez, Doctorado en Sociología, ICSyH - BUAP

Estado, burguesía y acumulación en su modalidad neoliberal en México: 
1982-2006 (dos casos particulares de acumulación)



Introducción general:

La presente investigación tiene como finalidad estudiar las relaciones y características del Estado capitalista mexicano en su modalidad neoliberal, y con él las contradicciones y antagonismos que se desenvuelven en la acumulación de capital. Particularmente nos referiremos a los cambios establecidos en la transición de la modalidad desarrollista a la modalidad neoliberal en sus procesos de acumulación en México, que ocurrieron en el periodo de1982-2006. Estos procesos de transición implicaron la construcción de un nuevo marco social, económico y político, sujeto a transformaciones formales en las relaciones sociales en sus actores anteriores y nuevos, producto de un devenir histórico, de un pasado actuando en el presente de la lucha de clases. 
En este sentido, se hará énfasis en la forma cómo con/desde el Estado-gobierno capitalista se han entreverado grupos de poder económico y político para generar finalmente una forma de acumulación particular que, implícitamente, lleva a un tipo de Estado-gobierno y burguesía propios de la modalidad neoliberal de Estado capitalista. 
Estudiaremos la modalidad neoliberal de Estado capitalista en México, y de manera particular nos abocaremos a la caracterización y relación entre el Estado moderno, la burguesía y su acumulación en el desarrollo del capitalismo neoliberal mexicano bajo dos casos representativos de la acumulación: Emilio Azcárraga Jean, tercera generación, heredero del emporio de medios de comunicación más importante de habla hispana surgido al amparo del poder Estado-gubernamental presidencial durante el sexenio de Miguel Alemán Valdés; y Carlos Slim Helú, caso emblemático de la acumulación de capital en la modalidad neoliberal cuya creación o expansión se asocia al poder presidencial durante el sexenio presidencial de Carlos Salinas de Gortari.


Aleida Orozco Sánchez, Maestría en Ciencias del Lenguaje, ICSyH -BUAP


El funcionamiento del lenguaje y la imagen en la
reorganización conceptual en un discurso:
Análisis argumentativo sobre los audiovisuales de la Nueva Policía
Federal en México en 2009


“Introducción”

Con el ingreso de Felipe Calderón Hinojosa a la presidencia de la república mexicana en 2006, los discursos que se han manejado en el ámbito político, académico, mediático y social de este país han girado en torno a la llamada Seguridad Nacional, que apuntala una lucha armada contra el crimen organizado y el narcotráfico como eje principal del sexenio 2006-2012.
Bajo este punto de la agenda gubernamental, el ejecutivo nacional ha generado una serie de propuestas como la modificación de leyes que regulan los delitos contra la salud –pues el narcotráfico es considerado un delito contra la salud-, de renovación de estructuras como aquellas que legitiman la violencia en un estado, a través de iniciativas de ley sobre una nueva policía, y la desaparición de otras instancias como la policía federal preventiva.
La promoción de estas licitaciones se ha configurado en una serie de discursos que el gobierno federal hace circular en instancias mediáticas como periódicos, radio y televisión, entre otros; no sólo como una forma de transmitir sus iniciativas sino como una manera de interactuar con los ciudadanos a través de la búsqueda de valores compartidos que le permitan “el impulso y consolidación de políticas de prevención del delito y la violencia” (Brown, p.27) para mediar una situación donde la lucha armada implica repercusiones violentas, “daños colaterales” y la modificación de ciertas estructuras en el país: “un escenario de victoria es impensable sin violencia en la lucha contra el crimen organizado” (Calderón, citado en Excélsior, 2010).

Bernardo García Díaz, Doctorado en Historia, ICSyH - BUAP

los obreros textiles de santa rosa
y la revolución



“introducción”

A partir de los inicios de la industrialización en el país, en los años cuarenta del siglo XIX, los trabajadores textiles fueron sin duda el grupo más numeroso del naciente proletariado fabril. Durante el periodo del Porfiriato, gracias a la expansión y modernización que experimentó la industria del algodón, acrecentaron la relevancia de su contingente. Ciertamente eran una exigua minoría en un país prevalentemente agrario y plagado de talleres artesanales. Aun así, dado que sus grupos más compactos y significativos se concentraban en la zona centro-oriental del país, muy cercana y bien comunicada con la ciudad de México el centro nervioso más sensible de la política nacional, su presencia y sus movilizaciones adquirieron una mayor resonancia de la que pudiera esperarse de su escaso peso numérico. Además por la fuerza económica que poseían las grandes sociedades anónimas, que estaba detrás de las factorías más importantes, la importancia del negocio del algodón y las disonancias de sus trabajadores nunca fueron aspectos y episodios menores en el acontecer de esa época.
Uno de los sectores de la nueva industria textil, que destacaría en el mundo fabril del Porfiriato, fue el representado por las grandes y medianas fábricas establecidas en el estrecho y lluvioso valle de Orizaba, ubicado al pie de las montañas de la Sierra Madre Oriental, en el estado de Veracruz. En esta región ocurrió uno de los procesos más concentrados y destilados del desarrollo industrial. Fue en el último cuarto del siglo xix cuando se combinaron un conjunto de condiciones para que las fuerzas productivas industriales alcanzaran ahí un impresionante florecimiento. Aprovechando lo mismo el Ferrocarril Mexicano, que atravesaba el valle desde 1873, que la abundancia de corrientes de agua para generar energía, un grupo de comerciantes-financieros franceses, establecieron dos grandes sociedades anónimas. Como fruto de ello nacerían la fábrica Santa Rosa (1898) y la Río Blanco (1892) imponentes por su dimensión e integración técnica. Aún trasplantadas en Estados Unidos, por estos años, habrían sido de las grandes y tecnológicamente de las más nuevas y modernas. La segunda de estas factorías además integraría a su proceso y renovaría las fábricas de San Lorenzo, Cerritos y la Cocolapan. Las fábricas de Orizaba cobraron fama de ser en su conjunto las más modernas de México al iniciarse el siglo XX. Se merecían esta reputación y la mantuvieron por un buen tiempo. Incluso después de que se abrió Metepec, otro gigante textil, y el valle de Atlixco experimentó una expansión notable de sus plantas, Orizaba continuaría considerándose el principal centro textil regional. 


Israel Canseco Mentado, Maestría en Ciencias del Lenguaje, ICSyH - BUAP



PRIMERAS INCURSIONES EN LA FILOSOFÍA DE LA LINGÜÍSTICA

“Introducción

La filosofía de la ciencia tiene como labor central el análisis y reflexión de distintas temáticas implicadas en el trabajo científico. Algunos tópicos que aparecen en esta tarea son: los métodos de la ciencia, las teorías científicas y su estructura, la explicación y la descripción como tareas adscritas a la labor científica, los experimentos, los modelos, el papel de la lógica-matemática, el cambio teórico y otros más.
Para entender dónde surgen y cómo se plantean estos temas, es importante entrar en contacto directo con alguna ciencia particular tanto teórica como experimentalmente. Con ello es factible captar los aspectos lingüísticos, formales y experimentales que permiten representar la compleja red de elementos y relaciones que conforma la estructura de las explicaciones científicas que van, de la observación, a la postulación de elementos altamente abstractos como leyes o categorías.
En un primer momento, dicho contacto con la ciencia implica elementos formales, es por ello que la filosofía de la ciencia desarrolla herramientas que le permiten al filósofo comprender y aprender la labor científica, entre ellas se destacan un lenguaje lógico-matemático, por lo regular altamente simbólico, y modelos científicos (o simplemente “modelos”) que permiten representar, describir y explicar aspectos que no pueden ser alcanzados con los recursos tradicionales de la filosofía y que son necesarios ante el estado y desarrollo actual de la ciencia.

Julio Jesús Broca Hernández, Maestría en Sociología, ICSyH - BUAP

Arte y Rebeldía en Movimiento: Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO-2006)
Imágenes dialécticas y movimiento social en la ruptura del tiempo lineal homogéneo



Introducción general:


Sí, pueden derrotarnos a la fuerza bruta, pero si eso sucede no es
una victoria, porque seguirá vivo el espíritu de lucha.
Dra. Escopeta. Lo vimos, lo vivimos. Oaxaca 2006.



Es la madrugada del 14 de junio de 2006. La policía desaloja sin aviso, con un saldo de varios heridos y muertos, al plantón que los maestros de la Sección 22 del SNTE habían instalado ante la negativa del gobernador de escuchar sus demandas. El mismo 14 de junio, horas más tarde, una oleada sin precedentes de apoyo popular a los profesores recupera el zócalo. En días posteriores evoluciona un proceso asambleario que madura en la constitución de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO). Una exigencia concreta acomuna una polifonía que viene de lejos: la destitución del gobernador. Poco a poco se cierran las oficinas públicas y se expulsan los poderes estatales de la ciudad, hasta quedar bajo control de la asamblea. También se toman cabeceras municipales y se crean asambleas de apoyo en las comunidades, barrios y colonias con larga tradición de resistencia. Fue necesaria toda la brutalidad de la Policía Federal, el terrorismo de estado y colaboración difamatoria de los medios de comunicación, para mantener al gobernador en su cargo, impunes a los asesinos y reinstaurar el poder estatal en Oaxaca. Ya que la persecución a los activistas aún continúa, podríamos decir que la rebeldía se ha dispersado nuevamente en los intersticios invisibles de la cotidianidad.

José Manuel Grajales e Ibarra, Maestría en Historia, ICSyH - BUAP

Redes sociales y factores políticos en la construcción de una fortuna personal. Agustín Mora y el acceso indirecto a los bienes de la desamortización eclesiástica en Puebla (1868 – 1904)


Introducción:

Agustín Mora es el tema de este estudio, que sin embargo no es una biografía en sentido estricto, aunque tiene mucho de ella. Fue un hombre del siglo XIX que no obstante haber nacido en el seno de una familia de escasos recursos, supo con algunos de sus rasgos personales y con las relaciones que cultivó con ciertos contemporáneos, hacerse de una importante fortuna en Puebla, durante la segunda mitad de aquel siglo de revueltas y revoluciones, de repúblicas federalistas y centralistas, cuando perdimos la mitad del territorio nacional y tuvimos como forma de gobierno un imperio sostenido por una potencia extranjera. La mitad de un siglo que de hecho se prolongó hasta 1910, con el final del largo gobierno de Porfirio Díaz por el estallido de la Revolución. Fue un tiempo de convulsiones, de levantamientos militares, de intervenciones, de graves problemas económicos, de enfrentamientos con la Iglesia católica, de reformas laicas para separar a ésta del Estado y mermar el poder omnipotente que conservaba desde la colonia. Se trató, en fin, de un periodo en el que para los mexicanos fue muy difícil crear, incrementar y mantener una fortuna, a menos que se fuera parte de la población extranjera blanca o de las élites –criollas y mestizas– políticas, militares o eclesiásticas.

Marcos Santiago Cuautle Aguilar, Maestría en Historia, ICSyH - BUAP

La esfinge del Señor Fray Bartolomé de las Casas. Enigma de solución retórica: Proceso sistémico en la estructuración del bastión regular y misión de Estado expansionista





Presentación: 

Para el responsable de este estudio, existe un imperioso compromiso con la historiografía y su progresión. Si se medita la constitución de la historiografía como resultado tanto del esfuerzo como de la responsabilidad científica, entonces quien redacta la siguiente PRESENTACIÓN pretende operar la ciencia misma, al menos, sin el neblinoso ímpetu nobiliario que tanto ufana y enrarece la objetividad del quehacer de la historia. Por eso, tomo como prioritaria la rigurosidad de la investigación. Así que afronto el tema que me compete con convicción y profundo vínculo social.
En América, México es uno de los países resultado del horror, cuya onda se expandió en cada momento crítico de la sociedad colonial a la Independencia, y de ahí con la Revolución hasta nuestros días de cárteles. Si hablamos de horror, no es para situar al lector en el repetitivo extremo victimario. Todas las tesis que vinculan a México con la destrucción y el sometimiento, eufemizan el pasado —ni qué decir del futuro ridículamente esquematizado a partir de los viejos días de gloria—, pues al decantarse en el crisol humanitarista, alimentan el fuego funcionalista mexicano hasta grados demagógicos.  En cuanto a la destrucción de Las Indias, es imposible negarla, pero por sí sola en nada ayuda a resolver lo que ahora se ha vuelto parodia de la identidad: ni raza cósmica o cultura prehispánica, ni un vivir mejor. De ningún modo planteo que el panorama de desaliento o desesperación nacional —trastornos que en la actualidad parecen generalizados— sean la consecuencia principal de un legado de corrupción y colusión emanado de la desmedida conquista. De ser así, la imagen presuntamente crítica de la temporalidad social de México, se reduciría a una línea fútil de rapiñas interminables. Hay que plantear las cuestiones de la historia de México —y por qué no, de la historia mexicana— desde otro mirador. 


miércoles, 8 de agosto de 2012

Erika Galicia Isasmendi, Doctorado en Historia, ICSyH - BUAP


Confinar y corregir el cuerpo femenino en los recogimientos de las ciudades de México y Puebla, siglo XVIII

“Introducción”

Con la tesis de maestría titulada El rey, la espada y el caballero, Barajas y tahúres en Nueva España, 1740-1798, me acerqué al escenario de un mundo lúdico, en donde los tahúres se liberaron del tedio de la vida diaria a través del juego de naipes, ya que éste les brindó emociones, delicias, angustias, además de esperanzas para ganar algunas monedas. El cuerpo lúdico que se palpó en mayor porcentaje fue el masculino, que evidenció distintos movimientos corporales, como el de las manos, que con destreza pudieron esconder el naipe en la manga o el cuerpo ágil que trepó entre los balcones para poder escabullirse por azoteas o el cuerpo capturado y custodiado que fue confinado en la cárcel pública. Pero mi atención quedó ligada en los pocos actores femeninos que participaron en ese mundo lúdico, y que fueron catalogadas como "delincuentes" al verse involucradas de alguna manera con tahúres y, en otras ocasiones, siendo ellas las tahúres. El cuerpo femenino era el que organizaba e invitaba a las tertulias y con ayuda de algún amigo se organizaba la cena que a la postre terminaba en juego de naipes.
Al observar cómo las autoridades civiles, militares y religiosas combatieron la apuesta y los desórdenes presentes en los juegos de naipes del mundo masculino, mi interés se centró en el estudio sobre las formas de confinar y corregir el cuerpo femenino en los recogimientos novohispanos, porque sólo en una ocasión, de las tres mujeres tahúres involucradas, se menciona que una seria puesta en el recogimiento, mientras que a las otras dos se les dejaría libres. Esta circunstancia fue la que motivo que se decidiera estudiar a dicha institución.

Alberto Cuanal Cano, Maestría en Historia, ICSyH - BUAP


 AGRICULTURA, METABOLISMO SOCIAL Y MOVILIDAD POBLACIONAL INDÍGENA EN EL VALLE POBLANO-TLAXCALTECA: LA VILLA DE CARRIÓN, ATLIXCO, Y LA CIUDAD DE LOS ÁNGELES, PUEBLA, A MEDIADOS DEL SIGLO XVI.


“INTRODUCCIÓN”


El predominio de los grandes temas sobre los pequeños, conlleva el olvido, entre otras partes fundamentales, de los actores asociales que configuran la estructura de una sociedad. Aunado a esto, cada vez son más las formas en que puede ser estudiado el pasado de los seres humanos y estas formas diferentes pueden corresponder a problemáticas que surgen en el presente y que requieren de preguntas y soluciones innovadoras. En la práctica de las ciencias sociales, es común dejar de lado el estudio del mundo natural en donde estamos situados, como si estuviéramos en el vacío y nuestras acciones y necesidades no manipularan o transformaran la naturaleza. Por lo que hoy en día este tipo de análisis es limitado pues separa al ser humano de la naturaleza, y continúa reproduciendo la ilusión moderna del antropocentrismo. Se trata entonces de darle al mundo físico y biológico su lugar debido a la hora de discutir sobre el pasado, el presente y el futuro de toda la humanidad.

Elisa Fabian Hutizil, Maestría en Historia, ICSyH - BUAP


Historia de una práctica - Historia de una profesión.
La enfermería en Puebla a través de sus planes de estudio,
1916 – 1926

“INTRODUCCIÓN”

El interés por realizar esta investigación surgió en un primer momento por mi inclinación a temas sobre la vida laboral de las mujeres, más adelante pude centrar dicho interés en conocer el lugar que ocupan las mismas en el campo médico, investigación que cubrí en la licenciatura al buscar las condiciones que llevaron a profesionalizar la enfermería en México y Puebla.
Al estar recabando la información, hallé que las mujeres se ocupaban en un número mayor de la enfermería y en menor cantidad a otras ramas médicas,  desde que se tienen registros censales de los trabajos ejercidos por mujeres en México a principios del siglo XX. Esto me llevó a acercarme al tema de la enfermería y decidí tomarlo como objeto de estudio para esta investigación, realizando una reconstrucción histórica de la aparición de esta profesión en el ámbito educativo, tomando como referente documental sus planes de estudio, en un espacio particular como lo es Puebla.

Dulce María Martínez Méndez, Maestría en Ciencias del Lenguaje, ICSyH - BUAP


El gesto autorreferencial:
Semántica y narración intersubjetiva

“Introducción”

Ciertamente, las líneas del párrafo anterior resultan familiares a los terapeutas entrenados en el enfoque sistémico1. Sin duda su contenido apuntala la importancia de que en los encuentros comunicativos cotidianos emerge un conjunto fluido y multifacético de diversos modos del discurso oral y del comportamiento corporal, los cuales adquieren importancia analítica tanto para los estudiosos de la interacción social como para los psicólogos clínicos.
Sin embargo, los profesionales en psicología –dedicados en mayor medida en desentrañar la dinámica de las relaciones sociales de sus usuarios2 en tanto continuo mutuo intercambio de informaciones– han dejado de lado la observación de que en la comunicación humana, fenómenos como la gestualidad adquieren importancia capital para dar cuenta del significado de la acción social.

Alberto del Castillo Troncoso, Doctorado en Historia, ICSyH - BUAP


MEMORIA Y REPRESENTACIONES.
LA FOTOGRAFÍA Y EL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL DE 1968

“Introducción: el 68 en imágenes”

Durante los años sesenta del siglo pasado, se produjeron movimientos estudiantiles a lo largo y ancho del planeta. Algunos de sus epicentros más relevantes tuvieron lugar en San Francisco, Tokio, París, México, Córdoba, Sao Paulo, Berlín, Madrid, Río de Janeiro, Buenos Aires y Nueva York.
Se ha discutido el contexto cultural de la época para sugerir algunas vertientes vinculadas a las rebeliones juveniles en aquellos años: el auge económico de la posguerra, la masificación de las estructuras universitarias, la divulgación de un mayor interés por ciertas corrientes filosóficas y espirituales y su contraste con la deshumanización tecnológica, la irrupción de una brecha generacional, la influencia del rock y los movimientos contraculturales, entre otros factores que esbozan la llegada de una sociedad  posindustrial. Todos ellos deben tomarse en cuenta en base a los enormes desniveles y contrastes regionales.
A lo largo del primer semestre del 68 los conflictos estudiantiles  ocuparon la atención de la opinión pública internacional y se propagaron por diversas latitudes. Por su parte, México permanecía en calma, aparentemente ocupado con el ambiente preolímpico gestado básicamente en los medios.


Hugo Rodríguez Pérez, Maestría en Ciencias del Lenguaje, ICSyH - BUAP


COHESIÓN Y COHERENCIA DISCURSIVA EN EL
CASO DE UN PACIENTE CON AFASIA DE BROCA




“INTRODUCCIÓN”

El lenguaje es una herramienta intelectual que sirve como instrumento para la comunicación y, cómo un método de regular u organizar los procesos mentales humanos. Desde la perspectiva de la Ciencia Cognitiva, el lenguaje es considerado como un sistema de procesamiento de información, el cuál posee etapas caracterizables perfectamente definidas.
Las alteraciones del lenguaje se dan por lesiones en áreas asociativas del hemisferio dominante y se denominan afasias, que etimológicamente significa ausencia del lenguaje (del griego a: negación y phasis: lenguaje). Una afasia consiste en un trastorno del lenguaje ocasionado por una lesión cerebral en una persona que previamente podía hablar con normalidad.
Desde el punto de vista neurológico, podemos considerar el lenguaje como el resultado de la actividad de una organización neuronal responsable de la integración y la emisión de los mensajes lingüísticos. La desorganización de esta actividad como resultado de una lesión cerebral constituye el síndrome afásico, la exploración del cual evidencia los aspectos lingüísticos conservados, los destruidos y los alterados (Vendrell-Brucet, 2001).
Es muy importante tener en cuenta que una perturbación del lenguaje no siempre significa que la lesión ha destruido la función correspondiente, sino que, quizás, solamente haya afectado algunos de los elementos necesarios para que esta función se lleve a cabo correctamente. De esta manera, las capacidades lingüísticas del afásico deben contemplarse como el resultado final de una combinación entre las funciones alteradas y del conjunto de posibilidades preservadas en el cerebro del paciente.
A pesar de que existen un gran número de procesos lingüísticos, se pueden identificar dos operaciones básicas: selección y secuenciación; es decir, el lenguaje como un paradigma y el lenguaje como un sintagma. Desde el siglo XIX se reconoce claramente que existen dos síndromes afásicos fundamentales, denominados de diferentes maneras, pero básicamente correspondientes a la afasia de Wernicke y a la afasia de Broca.

Martín Sánchez Camargo, Doctorado en Ciencias del Lenguaje, ICSyH - BUAP


LA ARGUMENTACIÓN EN LA PRODUCCIÓN DE LA ESCRITURA
ACADÉMICA EN EL MEDIO UNIVERSITARIO


“INTRODUCCIÓN”


Vivimos tiempos en los que el concepto de ciencia y de conocimiento, de una milenaria raigambre occidental, ya no domina por lo menos con la misma fuerza o autoridad que en siglos anteriores; lo mismo ocurre con los criterios estructurados en las ciencias sociales o las humanidades, especialmente si epistemológicamente están fundados en principios de las ciencias exactas. Los esquemas de razonamiento proporcionados por las ciencias naturales1, por ejemplo, no funcionan en la literatura cuando Jorge Luis Borges anuncia que la mejor versión de El Quijote no es española, sino inglesa; la humorada del escritor siembra la duda en una pléyade de cervantistas que olvidaron esculcar las bibliotecas británicas. Y no conforme, el argentino se regodea con una ironía mayor: ―Pierre Menard, autor de El Quijote‖.

Roberto Pérez y Pérez, Maestría en Historia, ICSyH - BUAP


LA POBLACIÓN DE SANGRE NEGRA EN
LA CIUDAD DE PUEBLA EN EL SIGLO XVII.
UNA MIRADA SOCIAL


“INTRODUCCIÓN”


Las relaciones que distintos grupos humanos han establecido a lo largo del tiempo se pueden diferenciar, por principio de cuentas entre: aquellas que se realizan por propia voluntad y aquellas en las que alguno de los dos se ve forzado. Del mismo modo, el acercamiento de un pueblo con otro o de una comunidad hacia otra encuentra diversos caminos y diferentes motivos. En algunas ocasiones estos pueden ser con fines comerciales y económicos, de acercamiento cultural, de investigación o conocimiento; por otro lado existen aquellas que buscan la conquista, el sojuzgamiento o el sometimiento.
En la mayoría de los casos la relación pasa por una clara diferenciación entre el poderoso y el débil, entre aquel que busca explotar y aquel que no tiene más opción que ser explotado. Este fue el caso de la esclavitud que se desarrolló de los siglos XV al XIX entre los colonizadores europeos y lo que ellos consideraron cómo tribus o naciones africanas según sus características, cuyos habitantes fueron llevados por la fuerza hacia el viejo y hacia el nuevo continente para servir de mano de obra en la construcción de las ciudades, para el arduo trabajo de los cañaverales y plantaciones de las regiones costeras en donde los climas extremos y las terribles enfermedades acababan rápidamente con las poblaciones indígenas y en parte también, por el hecho de que diversos teólogos y eruditos como fray Bartolomé de las Casas emprendieron la defensa de la libertad de los indios considerarlos tiernos en la fe católica y súbditos del monarca.

María Teresa Ascencio Cedillo, Maestría en Historia, ICSyH - BUAP

El cuerpo agredido: entre la palabra y el puñal Puebla, 1909-1911



Introducción:

A lo largo del siglo XIX se condujo a México hacía un Estado moderno, mientras tanto, el viejo sistema colonial poco a poco se fue quedando atrás, pero sin desaparecer por completo. Fue en el tránsito del siglo XIX al XX, durante el régimen porfirista, cuando se logró el mayor avance en la consolidación del Estado nacional mexicano. En este período se experimentó una aceleración en los procesos de integración política y de producción comercial que favorecieron la  estabilidad social y política en una nación por largo tiempo turbulenta.1 Con todo, la consolidación política y el desarrollo capitalista del Porfiriato, acompañados por un rápido crecimiento de la población, ocasionaron deterioro y trastornos sociales reflejados con mayor intensidad en los primeros años del siglo XX.